jueves, 5 de marzo de 2015

Nuevos Ferrocarriles Argentinos, una Gran Noticia

 Por Fabián Curotto

Hoy Cristina decía "Tener nuevos ferrocarriles es también tener una nueva actitud frente a los trenes”, y agregaba “Tenemos que cuidar mucho a estos vagones y pedirles a los gobernantes que los cuiden, y que los trabajadores brinden un buen servicio, un servicio de calidad" para que "nunca más se dé excusa a algún gobernante para despojar de patrimonio a los argentinos”, haciendo referencia al proceso privatizador de los '90 que cerró ramales y desmanteló el sueño -y la vida- de tantos. Creo no exagerar; la vida del trabajador ya no fué la misma, la vida de muchisimos pueblos y ciudades del interior, tampoco.

Y la Presidenta decía todo aquello mientras recibía material rodante nuevo, vagones cómodos, que disponen de iluminación led, señalamiento electrónico visual y sonoro, tecnología destinada a la línea Roca. Scalabrini Ortiz impulsó el sueño de los ferrocarriles nacionales, Juan Domingo Perón lo materializó, Cristina lo re-impulsa. Ya que mencioné a Perón, la negociación que realizó con los ingleses en aquel momento, fue extraordinaria. Dejo el enlace a un video para el que quiera disfrutar de aquello al final de esta nota.

Cristina agregó que además se prevé la electrificación del ramal Constitución-La Plata, "obra prometida hace más de 30 años por Raúl Alfonsín", y tambien dió la excelente noticia de la reactivación del tren desde Buenos Aires a Rosario.

Si hablamos de trenes no puedo dejar de mencionar la tragedia ocurrida en la terminal de Once, hace ya tres años. El desmanejo de los trenes sobrevivía aún en estos tiempos de transformación, más allá que las responsabilidades del accidente hayan tenido que ver en mucho con el motorman, según lo que se está comprobando en la justicia. Pero de todos modos la cosa no estaba bien, y era algo de lo que también tenía que ocuparse este gobierno que supo ocuparse y resolver satisfactoriamente tantas cuestiones desde 2003. Y si hablamos del gobierno hablamos de su mérito de haber reactivado el país, de haberlo desendeudado, de haber reconstruído gran parte del tejido social que había quedado maltrecho tras los años de neoliberalismo.

Y así fué entonces que el Estado se puso al frente, primero con la línea Sarmiento.

Puede haber todavía un desconfiado que diga ¿puede el Estado gestionar eficientemente al sistema ferroviario? Para considerar el punto Cristina dió significativos números el 1° de Marzo pasado, en el Congreso Nacional. La Presidenta ofreció datos comparativos: En los últimos tiempos el aumento de gastos de operación para la línea Sarmiento -que ya administra el Estado- fue de 17 por ciento, mientras que los operadores privados aumentaron superlativamente sus gastos. En la línea San Martín, 77 por ciento; en el Roca, 27 por ciento; en el Belgrano Sur, 56 por ciento y en el Mitre, 51 por ciento.

Además el sistema ferroviario tiene un objetivo social, además del comercial en el sistema de cargas, y la soberanía tambien gravita en estas cosas. También ocurre así con una aerolínea de bandera, que atiende necesidades concretas de la población que una empresa privada no está dispuesta a contemplar por el simple hecho de que no es rentable. Algunas cuestiones no se pueden ni se deben medir nunca con la vara de la rentabilidad. La supervivencia económica de muchos pueblos del interior, por turismo, por trabajo, por bienes de uso, por comunicación, trasciende absolutamente lo que pueda opinar la billetera de un gerente.

Ahí aparece una cuestión de Estado; si ahí hay gente con necesidad de transporte frecuente y barato, el estado debe ocuparse en ese sentido... no declarar a un pueblo inviable, como se estilaba hacer en la década de los 90, en donde lo que no era rentable desde lo económico, parecía no tener lugar en la tierra. Así pasaba con la cultura también, nada es casual.

Hoy tomé de mi biblioteca un libro grueso, con las obras de Scalabrini Ortiz. Y pensé que debo releerlo, pues lo leí hace unos años, con una sensación de nostalgia, de dolor por el no casual abandono al que se sometieron los trenes, y alguna esperanza abrigaba al leer, pero acompañada de incertidumbre. El actual Gobierno Nacional y Popular en ésto también me llenó de alegría, como lo hizo con YPF, con Aerolíneas, con la inclusión social, con la postura ante los genocidas de la última dictadura cívico-militar, y con tanto mas.

Cierro con un punto que no hay que soslayar. Cuando uno toma una medida, cuando la decisión política marca determinado rumbo, se tocan intereses. Ya saldrán algunos a intentar oradar a la medida. Es claro, que el pueblo tenga transporte barato para muchos no es negocio, que funcione el Belgrano cargas, para algunos que se manejaban monopólicamente, es competencia. Los que quieren el control o el monopolio del transporte empezarán a patalear. El tema es que no perdamos de vista que si patalean es porque quisieron tener todo el control sobre determinado sector y les duele compartirlo. A esos les va a seguir yendo bien, ni lo dudemos, pero sobreactuarán un drama para intentar que nadie les saque siquiera un poquito del control que pretenden, que es el control total de todos los negocios, a no engañarnos.

Pero allí estarán los pueblos del interior, viendo que se acerca de nuevo y sobre rieles el turista, el proveedor, el pariente... la vida.

Aquí va el video prometido, la palabra de Perón







No hay comentarios:

Publicar un comentario